Poco antes del estreno de la película Star Wars, el despertar de la Fuerza, se ha celebrado en Valencia el III Salón Internacional CIFICOM, con una gran diversidad de actividades sobre el cine y la ciencia ficción: conferencias, mesas redondas, y presencia de actores y personajes famosos. Uno de los que acudió fue el actor Julian Glover, que también intervino en la famosa saga.
Ante el inminente estreno de la esperada película Star Wars VII: el despertar de la Fuerza y el 30 aniversario de Regreso al futuro, se ha celebrado durante los días 10 y 11 de octubre de 2015, el III Salón Internacional de Cine, Ficción, Coleccionismo y Merchandising, CIFICOM, un evento que nació para reunir a todas las personas inclinadas a estas aficiones. La convención se realizó en Valencia, con una gran diversidad de actividades sobre el cine y la ciencia ficción: conferencias, mesas redondas, proyecciones, merchandising, presencia de actores famosos y personajes de película, exhibiciones, firma de autógrafos y subastas benéficas. También estuvieron presentes algunos de los automóviles más famosos del séptimo arte, como el Ashton Martin de James Bond, el coche de los Cazafantasmas o KIT, el coche fantástico.
Se realizaron varias mesas redondas ante el público, que contaron con la presencia de grandes actores del doblaje del cine español. Luis Porcar, doblador de actores y personajes muy conocidos, como el Dr. House, George Clooney, John Malkovich, Michael Douglas, Chuck Norris, Jeremy Irons, etc., nos comentó lo complicado que es hacer doblaje en momentos personales dolorosos. Jordi Pons fue el doblador de muchos personajes de la década de los 80, destacando el de Michael J. Fox en Regreso al futuro y actualmente se recupera de un ictus que sufrió hace cinco años.
También estaba presente Camilo García, doblador entre otros muchos actores de Anthony Hopkins, Gene Hackman, Christopher Lee o Gerard Depardieu, que relató el gran trabajo de montaje en verso que le ha supuesto el texto en francés de Cyrano de Bergerac. Es asimismo el doblador de Harrison Ford en Star Wars, lo que permitió que deleitara al público con la ya famosa frase del tráiler de la próxima película: «Chewie, hemos vuelto». Gracias a él conocemos que habrá un próximo avance que recibirán de la productora DISNEY, aunque por su contrato de confidencialidad no nos pudo contar nada de Star Wars VII: el despertar de la Fuerza. Como anécdota, comentó que hay tal secretismo alrededor de esta película que las imágenes que reciben para poder doblarlas, contienen solo las bocas de los actores hablando en las escenas de la película.
En el salón, también participaron de forma destacada los intérpretes británicos Julian Glover y Anthony Forrest, actores ambos de las sagas de Star Wars y James Bond, que nos hablaron de sus experiencias y contestaron las preguntas de los fans, niños y mayores. Julian Glover habla a ESFINGE en una entrevista en exclusiva, contando con la inestimable colaboración en la traducción del inglés de Sonia Martos y Aurora García.
Julian Glover en Valencia
Julian Glover, a sus ochenta años de edad, sigue en plena forma, después de haber participado en una gran cantidad de películas y habiendo trabajado con grandes directores de la talla de Steven Spielberg y George Lucas (Indiana Jones y la última cruzada y Star Wars V: el Imperio contraataca). Sigue actuando en la exitosa serie Juego de tronos y se entusiasma con poder actuar este otoño con la Royal Shakespeare Company de Inglaterra para poder interpretar a Shakespeare, su gran pasión, del que ya ha representado todas las obras menos una. Durante la entrevista mostró una gran generosidad y muy buen humor.
¿Qué le ha aportado personalmente la carrera de actor?
Es difícil de decir, porque no puedo verme a mí mismo, pero dentro de mí estaba la vocación desde que tenía quince años; mi sueño era ser actor y no hubo ningún titubeo al respecto, y cuando se lo conté a mis padres no tuve ningún rechazo por su parte. Al contrario, dijeron: «Qué bien, tenemos un chico de quince años que sabe lo que quiere», así que tuve suerte. He trabajado mucho durante mi vida, ha habido muchas satisfacciones y muchas depresiones profundas, porque es un trabajo muy emotivo.
¿Qué aconsejaría a los actores cuando entran en crisis, sobre todo por la falta de trabajo?
No hay consejo mejor que mentalizarse de que hay que pasar por eso si quieres conseguir ser actor. Pero si no consigues trabajo durante dos años, también es para pensarse el seguir. Si uno quiere continuar, debe crear su propio trabajo, montará un escenario, o se subirá a una mesa para poder generar esa oportunidad de trabajo.
Yo, al principio, trabajaba de camarero, limpiando restaurantes, pintando paredes, hasta que conseguí vivir de ser actor, pero también hay muchos altibajos. Recuerdo en una ocasión que estuve sin trabajo durante seis meses. Pensaba en vender la casa, ya había vendido el coche, tenía un niño pequeño de cinco años y estaba desesperado. De repente, me llamaron para hacer una película en Atenas con Anthony Hopkins y, dos días antes de viajar allí, hubo una huelga de los trabajadores de la industria del cine en EE.UU., así que cancelaron la película, perdiendo yo el dinero del hotel por la reserva. Afortunadamente, a los pocos días me llamaron para hacer Alfredo el Grande, y a la semana siguiente me fui a Corinto con mi mujer y mi hijo al rodaje, y eso me salvó. Pero a la tercera semana de grabación, mi agente me llamó para que fuera urgentemente a Londres, para conocer al Sr. Broccoli, de las películas de James Bond, y le dije a mi agente que no podía ir porque tenía que rodar al día siguiente. Mi representante insistió en que cancelara el rodaje y contesté que no podía hacer eso, así que acudí al asistente de filmación para explicarle mi problema. Le conté que me habían llamado para una entrevista para el rodaje de una película de James Bond, y entonces concentraron toda la grabación de ese día para hacerlo en ¡tres horas! Luego, salí corriendo sin quitarme el maquillaje, tomé dos aviones seguidos para llegar a la cita en Londres y así pude conseguir el papel. Al día siguiente tuve que salir para Atenas y poder empezar la filmación a las 6 de la mañana. Aquella noche invité a una copa a toda la unidad de rodaje. La vida de un actor puede cambiar muy rápidamente.
Cuando interpretó a un general imperial en Star Wars, donde tenía que estar muerto de miedo ante Darth Vader, que era interpretado por David Prowse, del que fue compañero en la escuela, ¿qué pensó en el set de rodaje?
Lo curioso es que la primera vez que vi a David Prowse fue en Star Wars. Después él me dijo que habíamos ido a la misma escuela de niños, pero nunca lo había conocido.
En sus interpretaciones de villano refinado, ¿hay algún personaje que le haya costado construir? Y de los que ha interpretado, ¿cuál le ha gustado más?
No es muy difícil hacerlo. Los villanos suelen ser buenos papeles, pero mi norma es no pensar que son villanos cuando los estoy interpretando, sino considerar que ellos actúan así por alguna razón, aunque sea una mala razón. Por ejemplo, ¿qué estarías dispuesto a hacer por el secreto de la vida eterna? Eso es lo que persigue el malo que interpreté en Indiana Jones y la última cruzada, que además es mi villano favorito. También el malo de James Bond: Solo para tus ojos tenía una buena razón, cuidar de la patinadora.
¿Cómo fue la experiencia de trabajar con grandes directores como Steven Spielberg y George Lucas?
Cuando trabajas con los grandes, y hablo desde mi propia experiencia, y los conoces en el set de rodaje, los respetas y crees que va a ser una buena experiencia, pero no hay que tenerles miedo, porque son como tú. Ellos también tienen sus miedos. Es lo mismo que cuando trabajas con grandes actores, como Harrison Ford o Sean Connery, al que conozco desde que tenía veinticinco años.
¿Tiene alguna anécdota en el set de rodaje con los famosos actores con los que ha trabajado?
Cuando rodamos Indiana Jones y la última cruzada, hay una escena en la cual están Harrison Ford y Sean Connery atados a una silla, y ellos ya saben que soy un villano… Estaban ensayando y charlando sobre la escena y hay una joven que sale en la película. Según el guión, Sean le cuenta que ella es alemana y Harrison le dice: «¿Cómo lo sabes?», lo cual no estaba en el guión, y le contesta: «Habla dormida en sueños». Entonces se partieron de risa y Spielberg dijo: «¡Esto va a la película!».
Recuerdo también que cuando estábamos en Marruecos, hay una escena en la que participa Harrison Ford, donde aparece un asesino con una espada haciendo piruetas. Era una escena complicada para la que habían ensayado una gran pelea con mucho detalle, pero justo el día de rodaje Harrison Ford tenía un gran dolor de estómago y náuseas. En el momento del rodaje, sale el asesino y hace todos los malabarismos con la espada. Entonces Harrison Ford saca la pistola y le pega un tiro. ¡Se acabó la escena! Resultó una gran escena de humor y así quedó grabado en la película.
Un gran actor con un gran sentido del humor y mucha experiencia en su haber.
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